sábado, 10 de diciembre de 2011

Hay mil miedos que forman el camino que tenemos que seguir hacía la felicidad, la libertad y los sueños. Pero el amor puede conquistar el miedo. Olvida eso de preguntar para qué estás aquí. Busca en tu ser, ahí tienes la respuesta, tu sabes quién eres y qué quieres. Busca en tu corazón y verás la forma de saberlo. Para mí hay tres cosas que son permanentes: la esperanza, la fe y el amor; pero la más importante es el amor, ya que nunca dejará de existir. Eso sí, no tienes que buscar siempre el amor, sino buscar y encontrar dentro de ti todas las barreras que has construido en contra de el. Y a partir de ahora no me darán miedo las tormentas, porque estoy aprendiendo a navegar y no hablo de esos truenos… Hace unos días comprendí que todo sucede por alguna razón, que cada uno de los momentos de nuestra vida es una oportunidad para elegir el amor sobre el miedo. Aprendí que si escuchas una voz que te diga “Jamás lo podrás conseguir” entonces lucha con todas tus fuerzas, demuestra que puedes y esa voz se callará. Y sigue con confianza el rumbo de tus sueños. Vive la vida que siempre has imaginado. Comprendí que dentro de treinta años me arrepentiré más por las cosas que no hice, que por lo que he hecho. Así que navega lejos del puerto seguro. Y despliega bien tus velas. Explora. Sueña. Descubre. Porque siempre me han dicho que empiece por hacer lo necesario, siga por hacer lo posible y acabaré logrando lo imposible. El secreto de conseguir lo que te propongas puede estar en cuatro Ces: Curiosidad, Confianza, Coraje y Constancia y la más importante de todas es la confianza. Cuando vayas creciendo debes darte cuenta de que no todas tus acciones van a ser perfectas, pero cometer errores y ver lo que sucede forma parte de hacer lo correcto. Los pesimistas ven la dificultad en cada oportunidad y los optimistas ven la oportunidad en cada dificultad. Sé optimista y vence esos mil miedos que invaden tu camino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario